sábado, 30 de abril de 2016

La primavera también llega al deporte

Hola de nuevo. Somos Tania, Maialen, Lorena y Rubén y os vamos a contar como fue nuestra experiencia en el montaje de los dos escaparates que la tienda Zocos dedica a producto de ropa y calzado para deporte. Pero antes, una foto de todo nuestro trabajo previo: un atrezo que huele a primavera y que íbamos a colocar en los escaparates.




Cuando llegamos a Zocos, Mila, su dueña,  nos enseñó la ropa de primavera que había llegado y que podíamos poner en los maniquíes. Nos llevó su tiempo elegir, combinar, volver a elegir…





El siguiente paso fue distribuir los cinco maniquíes en los escaparates. Después de darles muchas vueltas, moverlos, girarlos, entrar y salir para comprobar, conseguimos estar satisfechos con el resultado y empezamos a colocar la decoración.



Ibamos dispuestos a acabar en dos horas y nos llevó mucho más. Pero ni nos dimos cuenta, el tiempo se nos pasó volando. Queremos agradecer a Mila la oportunidad que nos ofreció al dejarnos hacer sus escaparates, su confianza en nosotros y todo lo que aprendimos con ella ¡Maravillosa Mila! Es la que está en el centro en esta última foto.
Muchos saludos,
Lorena Súarez, Tania Vázquez, Maialen Carregal y Rubén Mendoza.






viernes, 29 de abril de 2016

Inauguramos el escaparate de primavera

Nos toca a nosotros, Paula y David, contaros cómo fue el montaje de nuestro primer escaparate en una tienda real.
Fuimos a la tienda cuatro alumnos y, una vez allí, nos dividimos en dos grupos y repartimos tareas para acabar cuanto antes y no interrumpir la actividad de la tienda.

A David y a Anxo les tocó colocar la decoración que iba colgada (globos y banderines). Tuvieron algún problemilla: cuando conseguían colar en el falso techo el alfiler que sostenía un globo, se les caían los otros. Pero, terqueando, lo consiguieron.




Vanesa y Paula, en el otro grupo, nos encargamos de la parte que más nos gustaba: seleccionar el producto que se iba a exponer, agruparlo, decidir dónde íbamos a poner cada zapato y bolso y el atrezzo correspondiente. Toda una fiesta en medio de sandalias preciosas, bailarinas, zapatitos de bebé… y muchos bolsos. 




La responsabilidad de querer hacerlo lo mejor posible también nos hacía dudar y darle unas cuantas vueltas a cada decisión, y salir y volver a salir para comprobar si quedaba bien… Queríamos un conjunto armonioso y que no quedase muy cargado.



 Y sólo una cosa más: la experiencia nos ayudó a poner en práctica todo lo que habíamos visto en clase y a superar los problemas que iban surgiendo ya que no es todo tan fácil como nos parecía. Pero, ¡qué buena experiencia!
Un saludo,
Paula Fraga y David Morandeira.